Un día en la tarde lluviosa en la
casa de campo del abuelo de Martín, su abuelo un hombre no tan viejo, muy
querido por sus nietos le dice a Martín que la naturaleza parece como si se
enfadara el mar que hasta hace poco estaba tranquilo, ahora se agita, se enoja,
esta acción pasa porque los países desarrollados hacen sus experimentos, haciendo explorar
bombas, esto es lo que altera las mareas y en otras ocasiones una montaña desde
lo profundo de la tierra saca piedras y lava incandescente, en algunas
ocasiones la corteza terrestre se
agrieta, todo se mueve al paso que se destruya o se deteriora según la
intensidad del temblor de la tierra.
Le pregunta el abuelo a Martín
¿sabes cómo se llaman estos fenómenos de la naturaleza?
Si respondió Martín
Cuando sopla muy fuerte el viento
sobre el mar, se produce una tempestad, una montaña que arroja lava es un
volcán y cuando la tierra tiembla es un terremoto.
Bien dijo el abuelo. Además de
esto se me olvidaba decirte, el daño que producen las lluvias torrenciales
cuando se desbordan los ríos; ahora bien ¿tú crees que todos estos fenómenos
son inevitables? _pues yo creo que sí, que no se pueden evitar. Cierto es así,
siempre han existido, sin embargo el modo de vida en nuestra actual
civilización se han hecho más visibles estos fenómenos a causa del cambio
climático, es la respuesta de la naturaleza cuando se le trata mal, entonces
ella responde mal, es como si se enojara mucho mas que en tiempos pasados; es
decir la naturaleza reacciona de un modo distinto a lo habitual cuando se la
molesta, votando basuras a los ríos, calles y bosques, talando los arboles +,
botando montañas enteras para explotar
los minerales del suelo.
Al terminar esta conversación
Martín se dirige Asia su habitación al
entrar se acuesta y en su mente dice que nunca en su vida tirara basuras o
talara un árbol al contrario hará todo lo posible por tener un mundo libre de
basuras y con más árboles. Fin.
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